Así es como nuestros peques de dos años descubren su entorno. A través de su propio cuerpo con diferentes técnicas y materiales, y desarrollando la creatividad, el entusiasmo y la confianza en sí mismos. (Todas las fotos AQUÍ).
El resultado son sus primeras obras de arte en las que adquieren conceptos básicos como: las texturas de los objetos; la temperatura de los cuerpos; y la técnica bucofacial con la que ponemos en práctica el tono muscular y la psicomotricidad.
Elementos, todos ellos, imprescindibles para aprendizajes posteriores.